El Manchester City, ese club que sabe más de libras esterlinas que de fútbol, volvió a mostrar su interés por el centrocampista del Villarreal, Marcos Senna. El brasileño, nacionalizado español, se ha dejado querer. "No sería imposible" han sido sus palabras y sentirse "halagado" su sentimiento. Pero semejante disparate sería si el flamante campéon de la Eurocopa opta por el mismo atajo que Robinho. Se equivocaría con rotundidad Senna si lo que quiere es jugar al fútbol. Acertaría si su propósito es ir guardando en la despensa como los osos en invierno.
Y es que es ése sería el único motivo por el que el internacional de 32 años tomara un avíón con dirección a Manchester: ganar dinero y cerrar su carrera en un equipo mediocre, que lucha por no caer en el descenso de la Premier League. Senna, un jugador inteligente y pilar de la selección este pasado verano en Austria y Suiza, no puede equivocarse. Jugar la 'Champions' en Castellón es bastante más atractivo que visitar al Twente en la UEFA. En fin, una lástima para el aficionado español si se marcha...
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