La afición del Barça se queda sin paciencia. Es verdad, ayer el Getafe, con más suerte que valentía (cosa que sí tuvo en Múnich), sacó un punto del Camp Nou, maravilloso para los intereses del Real Madrid, que sigue manteniendo su distancia respecto al eterno rival, y para las propias aspiraciones getafenses, que poco a poco, consuman la ansiada salvación entre tanto sobresalto copero y continental.
El Getafe de Laudrup hizo saltar las alarmas en Can Barça por enésima vez en esta legislatura. Bien es cierto que ayer fue la primera vez que los aficionados blaugranas se quedaron sin paciencia pidiendo la cabeza de su presidente, pero no es la primera que demuestran su malestar. La situación se le ha escapado de las manos al presi culé. Ronaldinho gordo, fuera de forma, y más cerca del Milan que de su actual equipo. (Aún me pregunto cómo Laporta podrá engañar a Berlusconi con el tema Ronie. Para mí acabará jugando con Beckham en la MLS...).
Rijkaard solo, completamente solo en cada rueda de prensa si no es por Samuel Eto'o, que entiende más de estas situaciones que el resto del experimentado vestuario culé (Xavi, Puyol, Valdés...) y Begiristáin con las horas contadas. Para colmo, Cruyff desempapela otro chupa-chups y da un palito por debajo de la mesa. El Barça hace aguas, el Barça se ahoga. El Madrid respira, y respira porque sabe que antes o después levantará su segundo título seguido (y sin hacer excesivos méritos). Santo Dios...
El Getafe de Laudrup hizo saltar las alarmas en Can Barça por enésima vez en esta legislatura. Bien es cierto que ayer fue la primera vez que los aficionados blaugranas se quedaron sin paciencia pidiendo la cabeza de su presidente, pero no es la primera que demuestran su malestar. La situación se le ha escapado de las manos al presi culé. Ronaldinho gordo, fuera de forma, y más cerca del Milan que de su actual equipo. (Aún me pregunto cómo Laporta podrá engañar a Berlusconi con el tema Ronie. Para mí acabará jugando con Beckham en la MLS...).
Rijkaard solo, completamente solo en cada rueda de prensa si no es por Samuel Eto'o, que entiende más de estas situaciones que el resto del experimentado vestuario culé (Xavi, Puyol, Valdés...) y Begiristáin con las horas contadas. Para colmo, Cruyff desempapela otro chupa-chups y da un palito por debajo de la mesa. El Barça hace aguas, el Barça se ahoga. El Madrid respira, y respira porque sabe que antes o después levantará su segundo título seguido (y sin hacer excesivos méritos). Santo Dios...
No hay comentarios:
Publicar un comentario